Divagues
Estimada:
Después de una tarde larga de introspección debajo de una planta que mis conocimientos botánicos me impiden identificar, además del descanso y el sueño reparador, he llegado a una sola conclusión. Solo una, pero de importancia vital que hace a mi felicidad.
He concluido que descargo a mis cuatro hijos de hacer algún esfuerzo para lograr mi realización personal.
Deben entender, les diré, que no hace falta que hagan méritos para ponerme contento. Que al revés de algunos padres que se realizan con los logros de sus hijos, ellos tienen la felicidad que les da saber que cualquier tropiezo que tengan en la vida, cualquier meta que se propongan y no consigan, no debe sumergirlos en la depresión. Que ellos están ya realizados por el solo hecho de tenerme a mi como padre. Que he alcanzado las más variadas e insólitas metas de realización personal. Ellos están realizados en mi. Es un crédito a favor que tienen como capital en su paso por esta vida.
La semana que viene elegiré alguna otra planta del jardín para tirarme debajo y ejercitaré mis recursos intelectuales revisando lo acertado o no de mi humilde y solitaria conclusión.
Maestro:
Es probable que esa planta haya sido un Floripondio: Brugmansia arborea, Brugmansia purpúrea.
Un arbusto tan cultivado que ya se perdió el rastro de su
origen silvestre que embriagó con sus campanas blancas y rosadas a chamanes
mongoles, africanos y americanos.
Aunque use la ironía, tiene más razón de la que supone su
aparente conclusión egocéntrica. Sus hijos, ¿porqué deberían proporcionarle
algo? O ponerlo contento. Son libres, que sean como quieran, con tenerlo a Ud.
alcanza. Si un hijo carece de ese crédito, es posible que sea
desgraciado. Claro está y siempre hablando en serio, no bajo el poder
alucinógeno de planta alguna, ese crédito será o no acreditado.
Y esos hijos, que ha beneficiado con tal caudal, poseedores
de ese tesoro, un tiempo tal vez lo disfruten y otros, lamento decirlo,
no.
A.S.
Mis Musa.
Imagen: Brugmansia arborea. Floripondio.
Humilde el hombre....debe haberse avergonzado de escribir esto alguna vez!! Esto sólo se cuenta a los psiquiatras en la intimidad y no se desparrama al viento. MARTA, Britos
ResponderEliminarMarta, seguro que el hombre no es humilde ¿Qué importa ? ¿Porqué debería serlo ? ¡ Esto no es más que una broma...! Leelo de nuevo..¡ Es bueno !
ResponderEliminarMuy bueno Miss Musa, como siempre! Me siento totalmente identificado !! R.
ResponderEliminarMuy bien...¿ Apropiándose de cualidades ajenas...? 'Todos los hombres son iguales'...
Eliminar¡Muy Feliz Día !
Miss Musa: espero que sea tal como Ud dice ...y agradezco como siempre haberme publicado. GRACIAS. En el dia del padre !!
ResponderEliminarAh !!! era yo quien firma arriba !!! A.S.
ResponderEliminarPerdón, se me fue anónimo el comentario. A.Schleh
¿ Pero que duda cabe? No somos dueños de nada ni de nadie. Ni siquiera arrendatarios...¿ No ?
ResponderEliminarGracias por ese hermoso texto, y ¡ MUY FELIZ DÍA DEL PADRE !
Qué crítica por cuatro renglones señora Marta, si el autor se avergónzó que se embrome, no creo que sea para tanto, un escritor debe expresarse...¿ Usted lee ? ¿Ha leído algo ?
ResponderEliminarRespecto a la psiquiatría y los psiquiatras un poco aventuradas sus palabras. Los dejaría para los que opinan sin más ánimo que pavonearse.
E. Watson.
Marta capaz creyó era en serio lo que yo digo en este texto. Cada ser humano es unico e intransferible. A Schleh.
ResponderEliminarLeo esto y me parece perfecto para contestarle a E. Watson y a vos, al autor del texto cuestionado por Marta. No todo el mundo tiene la apertura mental para apreciar la ironía, es como el humor, exclusiva pertenencia del ser humano y su capacidad para usarlos.
ResponderEliminarMucho ruido y pocas nueces, a levantar la puntería Miss ...T.E.D
ResponderEliminarNo opino de la misma manera, pero por supuesto ¡Bienvenidas las críticas...!
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