AHORA, PISTACHOS

 

'Oro verde': los agricultores españoles cambian las aceitunas por pistachos 

'Incluso con solo 10 o 15 hectáreas de pistachos se puede vivir dignamente': maduración de pistachos. Fotografía: jessicahyde/Getty

Los productores en dificultades reemplazan los campos de trigo y los viñedos con un cultivo más lucrativo y resistente a la sequía.

Lo llaman oro verde, el cultivo comercial que podría rescatar a una de las regiones más pobres de España del declive y la despoblación a medida que los agricultores aran campos de trigo y viñedos y los replantan con pistachos. Con los agricultores ganando entre 65 y 85 céntimos por cada kilo de aceitunas que producen, y alrededor de 65 céntimos por las uvas, los pistachos, que cuestan entre 6 y 8 euros el kilo, están en una liga diferente.

“Solía ​​cultivar cereales, olivos y vides, pero los he abandonado todos para cultivar pistachos”, dice Gustavo Adolfo Gálvez, que tiene una plantación de pistachos cerca de Toledo, en Castilla-La Mancha, en el centro de España.  "Son mucho más rentables y baratos de producir, y significa que muchos más agricultores pueden sobrevivir".

Castilla La Mancha. España

En 1986, el gobierno regional de Castilla-La Mancha puso en marcha un proyecto de investigación para buscar cultivos alternativos que sus agricultores pudieran producir, dice José Francisco Couceiro López, del instituto regional de investigación y desarrollo agrícola. “Pasamos los siguientes 10 años investigando cultivos alternativos a los tres o cuatro que ya se cultivan aquí”, dice Couceiro López. “Una vez que pasamos de la teoría a la práctica, descartamos prácticamente todas las opciones menos el pistacho. El pistacho se adapta casi por arte de magia al clima de Castilla-La Mancha. Puede soportar el calor y el frío, y puede prosperar en suelos pobres y poco profundos”.

La siguiente etapa, dice, fue educar a los agricultores a través de una serie de cursos y jornadas de puertas abiertas. En 2013, Couceiro López coescribió un libro sobre el cultivo del pistacho que se ha convertido en un éxito de ventas en España y Latinoamérica. "La mayor desventaja es que los agricultores que plantan pistachos tienen que esperar al menos siete años antes de su primera cosecha decente",  aunque claramente muchos están convencidos de que vale la pena esperar, especialmente porque la demanda sigue superando a la oferta.

El año pasado, España cosechó 2.800 toneladas de pistachos en 70.000 hectáreas (173.000 acres), casi todas en La Mancha, pero aún es un recién llegado en un mercado dominado por California, Irán y Turquía, que entre ellos representan casi el 90% de la producción mundial. 

Los pistachos pueden soportar la sequía, un factor importante en La Mancha, pero necesitan abundante agua durante la etapa de formación de nueces. En California, la sequía severa y las restricciones en la explotación de las aguas subterráneas ya amenazan la cosecha de este año.   En Irán, la escasez de agua redujo la producción en un 35 % el año pasado, mientras que la sequía alrededor de Gaziantep, en el sur de Turquía, hogar de 42 m de pistachos, redujo la cosecha en un 40 %.

Aunque no son autóctonos de España, los pistachos existen en España desde la época de los romanos, dice Fran Figueroa, ecologista de Arba (Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono), que coincide en que son ideales para La Mancha. “Es el cultivo del futuro y necesita menos agua que las almendras, por ejemplo”. Si bien España es un jugador pequeño, compite en calidad más que en cantidad. La mayoría de las plantaciones de La Mancha son ecológicas, lo que da un valor añadido a sus cultivos.

“No quiero ser chovinista pero nuestros pistachos son los mejores del mercado”, dice Gálvez. “En Irán, el producto no es tan bueno, ni lo es en Turquía. La gente lo reconoce y está dispuesta a pagar por ello”.

Los pistachos se comen principalmente como snacks, pero también se utilizan mucho en la cocina de Oriente Medio, así como en la producción de pasteles, dulces, helados y cosméticos.   La popularización de los platos de Oriente Medio, a través de chefs como Yotam Ottolenghi, también ha aumentado la demanda de pistachos en Occidente. A medida que la gente abandona constantemente el campo, la España vaciada se ha convertido en un tema político que está siendo explotado por el partido de extrema derecha Vox. ¿Podría el oro verde de los pistachos atraer a la gente de vuelta a la tierra?

“La gente de mi pueblo se fue a la ciudad porque no podían sobrevivir como agricultores”. “Pero ahora ven que incluso con solo 10 o 15 hectáreas se puede vivir dignamente”.  “Estamos decididos a asegurarnos de no cometer el mismo error que cometimos con el vino, donde dejamos la comercialización a otros y los agricultores nunca obtuvimos los beneficios. Queremos asegurarnos de que sea el agricultor quien se beneficie de los pistachos”.