viernes, 29 de agosto de 2014

PIETARI POSTI



Pietari Posti, vocación por la ilustración y el uso del color

: Anna Gomis





Portada de la revista belga Knack, número sobre Barcelona


El finlandés Pietari Posti es de esos ilustradores vocacionales que recuerda su infancia entre dibujos y lápices de colores. Tras conversar con él, conocer su evolución y qué le ha inspirado desde que era un niño, además después de leer e investigar sobre su trayectoria, uno concluye que Posti es el ilustrador por excelencia: vocación, talento, formación, esfuerzo y proyectos.
Como en otros ilustradores, Posti reconoce la influencia de los cómics en los inicios de su trabajo: "Que yo recuerde, he dibujado desde pequeño algunas animaciones de la televisión (eran los 80) y sobre todo cómics que teníamos en casa como Asterix, Tintin o Lucky Luke, entre otros y que me inspiraban para dibujar. Luego leí cómics de Marvel, Spiderman, Punisher y otros superhéroes. Más tarde, encontré cómics más underground en la biblioteca de nuestro barrio, como Moebius, Milo Manara, Hugo Pratt, Katsuhiro Otomo (Akira) y Robert Crumb". Aunque el ilustrador admite que, pese a intentar dibujar cómics "en realidad no tenia ese sentido de contar historias o quizas la paciencia dentro de mí que se necesita para crear cómics". 
Estudió diseño gráfico en la universidad en Finlandia al mismo tiempo que acudía a cursos de ilustración que, como él mismo dice, "me apasionaban". En ese periodo fue cuando empezó a dibujar para diversas revistas de su país. A finales del 2005, poco después de acabar los estudios universitarios, decidió trasladarse a Barcelona, donde empezó desde cero promocionándose como ilustrador, logrando pronto sus primeros clientes.

Ilustración de la serie Forest

Ilustración Queen Biketrix realizada para Pekka Agency



Ilustración Storm para Fortune magazine

Pietari Posti usa el color de una forma muy particular, seleccionando un número limitado de colores para cada una de sus ilustraciones. Algunos ejemplos representativos son sus series relacionadas con el invierno y el bosque, Forest, donde sólo usa el blanco y dos tonos de azul. También sus portadas para la colección de libros Swallows and Amazons, (blanco, negro, azules y, como contraste, naranja-rojo); e incluso su portada para la revista Knack sobre Barcelona, donde el artista amplía la paleta cromática. Posti explica al respecto que le atraen “las paletas de colores limitados” y que esto se debe, posiblemente, a su admiración por los “ilustradores de los años 50, como Charley Harper o Olle Eksell”, y también a su gusto por los dibujos japoneses sobre paneles de madera. “Todos ellos usaban colores muy minimalistas”. El ilustrador finlandés añade que le gusta “limitar” el uso del color, concentrarse “en la composición de la ilustración y después añadir más color sólo si es necesario. Supongo que tengo algunas combinaciones favoritas como el turquesa con el rojo-naranja, pero también intento usar otros colores”.
El uso que hace del color y las formas geométricas que, en ocasiones, observamos en sus composiciones, ayudan a reconocer cierto estilo personal en Pietari Posti. Aunque él, lejos de buscar un sello propio o encasillarse en un estilo muy determinado a la hora de ilustrar, prefiere “seguir evolucionando todo el tiempo”. Añade que le gusta “estar probando cosas nuevas o intentar dibujar algo de una manera diferente” a la que lo hizo antes, “así mantengo mi trabajo también interesante para mí mismo”. Dice no preocuparse “demasiado” de su estilo: “Sólo quiero crear imagenes interesantes y bonitas y que se sigan viendo así siempre”.
El artista finlandés afincado en Barcelona no sólo investiga y evoluciona en su técnica como ilustrador, sino que también le gusta experimentar con los objetos que llevarán sus dibujos. Portadas para libros, anuncios en revistas, una colección de vajilla o sellos son algunos ejemplos de los distintos elementos decorados por Posti. “Me gusta la diversidad pero sí que me gustaría explorar más en la creación de ilustraciones para objetos. Un poster sólo tiene un ángulo para ser visto, pero un objeto tiene varios y me gusta ese reto”, añade. Precisamente esa diversidad de proyectos es el aspecto que más le gusta de su trabajo como ilustrador, y admite que se siente “muy afortunado” por poder ganarse la vida haciendo lo que más le gusta.

Ilustración para el centro comercial La Roca Village de Barcelona


Ilustración de portada para el Washington Post Spring Arts Preview


Ilustración perteneciente a la serie Ellas

Entre sus proyectos actuales figuran varias campañas de publicidad, las portadas para un libro y un disco y las ilustraciones para una conocida cadena de cafeterías en Estados Unidos. Su trabajo ha sido reconocido a nivel internacional con el premio V&A Illustration Awards 2013 por su ilustración para la portada del primer tomo de Swallows and Amazons, del escritor Arthur Ransome. Además, fue incluido en la selección oficial de los premios de la American Illustration 22 & 23, entidad que reconoce a los mejores ilustradores del momento. Sus composiciones también han aparecido en colecciones de ilustraciones como elIllustration Now vol.3 de la prestigiosa editorial Taschen. Con todo, la proyección de futuro del ilustrador Pietari Posti se prevé intensa e interesante y se perfila ya como uno de los artistas contemporáneos más destacados.




De Ilustrados.net. Todas las imágenes cortesía de Pietari Posti. Todos los derechos pertenecen al autor. Más información en http://studioposti.com/





jueves, 28 de agosto de 2014

GENES Y SUPERVIVENCIA





Tibetanos: soportando alturas.

Javier Sampedro








De los enigmas esenciales que plantea la evolución biológica, ninguno toca más de cerca la historia y la cultura que el origen de las adaptaciones que distinguen a unos seres humanos de otros: la piel clara en las latitudes nórdicas o la resistencia a la malaria en los trópicos, donde es endémica. Una de las más llamativas es la adaptación a las alturas de los pobladores del Tíbet, que les permite vivir a más 4.000 metros de altitud con una salud, una energía y una fertilidad que ningún otro humano puede alcanzar en semejante escasez de oxígeno. ¿Cómo lograron los tibetanos ese atributo? Hoy tenemos la respuesta: robándole un gen a los denisovanos, la especie arcaica que acampaba por esas alturas asiáticas antes de que los humanos modernos saliéramos de África.



Así como la población europea heredó de los neandertales los genes esenciales para soportar el frío de las estepas del continente, los tibetanos tomaron de los denisovanos –los antiguos humanos que poblaron Asia— un gen clave para adaptarse a las altitudes extremas, una cualidad, por cierto, muy envidiada por los escaladores occidentales. El gen se llama EPAS1, y permite a sus portadores vivir a las bajas concentraciones de oxígeno imperantes en las alturas del Tíbet. Los investigadores dirigidos por Rasmus Nielsen, de la Universidad de California en Berkeley lo han descubierto secuenciando (leyendo) el ADN de 40 tibetanos y 40 chinos de la etnia Han, la mayoritaria en el gigante asiático.
Hace solo ocho años, la mera hipótesis de que los humanos modernos pudieran haberse cruzado con otras especies arcaicas tras su salida de África se consideraba una herejía científica, o al menos una teoría marginal (y marginada). La primera demostración de esa actividad sexual irregular fue obtenida en 2006 por el genetista de la Universidad de Chicago Bruce Lahn, que observó con técnicas genómicas que un gen llamado microcephalin, importante para el desarrollo del cerebro, había llegado a los eurasiáticos actuales procedente de los neandertales: es decir, que había habido sexo entre ambas especies.
El hallazgo fue recibido con general escepticismo por la comunidad paleontológica, y en consecuencia rechazado por las principales revistas científicas, como Nature y Science. Pero el líder del campo del ADN antiguo, Svante Pääbo, del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Leipzig, consideró que las evidencias de Lahn eran muy sólidas. Y poco después, cuando presentó el primer genoma de un neandertal, obtenido a partir de un hueso fosilizado, él mismo se convirtió en un defensor de la teoría de los cruzamientos: había poca duda de que los neandertales nos habían pasado algunos genes, aunque no muchos. Hubo sexo, pero poco. Nada extraordinario.
“En mi opinión está claro que la introgresión adaptativa, o importación de genes útiles de especies arcaicas, ha sido mucho más importante para la evolución humana de lo que se pensaba previamente”, dice el jefe de la investigación publicada en Nature, Rasmus Nielsen. “A medida que los humanos migraban fuera de África hace unos 50.000 años y encontraban nuevos entornos, el intercambio de genes con especies que ya estaban adaptadas a esas condiciones les ayudó a adaptarse mucho más rápido a los nuevos entornos que encontraban”.
‘EPAS1’ ya había sido identificado previamente como el gen con mayores signos de “selección positiva” en la población tibetana. Ese concepto es central en la teoría evolutiva: cuando un gen es importante en cierto entorno, se propaga con mucha rapidez –es decir, en pocas generaciones— entre la gente que vive allí, y eso deja signos evidentes en el genoma de las poblaciones actuales. En particular, no solo el gen ventajoso, sino también amplias zonas a su alrededor (haplotipos, en la jerga), llevan los marcadores de ADN de los denisovanos, en lugar de los marcadores modernos que aparecen en el resto de los humanos actuales.


El altiplano tibetano, situado a altitudes superiores a los 4.000 metros, es un entorno inhóspito para la inmensa mayoría de los humanos, debido a su bajo nivel de oxígeno atmosférico, un 40% inferior al característico del nivel del mar. Los tibetanos son conocidos entre los fisiólogos por haberse adaptado con espectacular eficacia a esas condiciones, con una fertilidad más alta de la que muestran allí otras personas, y una mortalidad infantil mucho más baja. Todo ello es debido a su peculiar respuesta fisiológica a los bajos niveles de oxígeno, de la que el mayor responsable es el gen ‘EPAS1’ que han heredado de los denisovanos.














martes, 26 de agosto de 2014

TESTAMENTOS



El show de los testamentos.
Rolando Hanglin







Tengo en mi poder el Libro de los Testamentos, publicado en 1997, con la firma de Liliana Viola, que demuestra cuán genial -o tal vez chiflada- es la humanidad, a través de celebridades de todos los tiempos. Algunos párrafos de testamentos de famosos.
Ernesto "Che" Guevara (1928-1967): "Otra vez siento bajo mis talones el costillar de Rocinante, vuelvo al camino con mi adarga al brazo. Hace diez años les escribí otra carta de despedida. Según recuerdo, me lamentaba de no ser mejor soldado y médico; lo segundo ya no me interesa, soldado no soy tan malo...Puede que esta vez sea la definitiva. No lo busco, pero está dentro del cálculo lógico de probabilidades. Si es así, va un último abrazo...Los he querido mucho, sólo que no he sabido expresar mi cariño. Soy extremadamente rígido en mis acciones y creo que a veces no me entendieron. No era fácil entenderme. Créanme, solamente, hoy. Ahora, una voluntad que he pulido con delectación de artista sostendrá unas piernas fláccidas y unos pulmones cansados. Lo haré...Acuérdense de vez en cuando de este pequeño condottiero del siglo XX.Un gran abrazo de hijo pródigo y recalcitrante para ustedes. Ernesto".
Uno piensa: qué desperdicio. Valiente, culto, buen mozo, médico...¡Escribía como Cortázar! Pero, a lo mejor, uno es precisamente el desperdicio.

Lisandro de la Torre (1868-1939): "Señores, les ruego que se hagan cargo de la cremación de mi cadáver. Deseo que no haya acompañamiento público, ni ceremonia laica ni religiosa alguna, ni acceso de curiosos y fotógrafos para ver el cuerpo, con excepción de las personas que Uds. autoricen especialmente...Mucha gente buena me respeta y me quiere, y sentirá mi muerte. Eso me basta como recompensa...No debe darse importancia excesiva al desenlace final de una vida, aun cuando las preocupaciones vulgares sean otras...Si Uds. no lo desaprueban, desearía que mis cenizas fueran arrojadas al viento. Me parece una forma excelente de volver a la nada, confundiéndome con todo lo que muere en el universo". Uno de los fundadores del Partido Demócrata Progresista se suicidó en el sillón de su casa, pegándose un tiro en la boca.

José Martí, prócer cubano (1853-1895) "Madre mía: hoy, 25 de marzo, en vísperas de un largo viaje, pienso en usted. Usted se duele, en la cólera de su amor, del sacrificio de mi vida...Tengo razones para irme más contento y dichoso de lo que usted pudiera imaginarse. No son inútiles la verdad y la ternura. No sufra. Su Martí".

Manuel Dorrego (1787-1828), muere fusilado sin juicio tras la batalla de Navarro por orden del general Juan Lavalle: "Querida Angelita: en este momento me intiman que dentro de una hora debo morir. Ignoro el por qué. La Divina Providencia, en la cual confío en este momento crítico, lo ha querido así. Perdono a todos mis enemigos y suplico a mis amigos que no den paso alguno en desagravio de lo recibido por mí. Mi vida, educa a nuestras amables criaturas. Sé feliz, ya que no lo has podido ser en compañía del desgraciado Manuel Dorrego".

Nostradamus (1503-1566) famoso profeta llamado en realidad Maese Michel de Notre Dame: "No quiero que mi ataúd sea enterrado de la manera habitual, sino en posición vertical contra la pared de la iglesia de los franciscanos. De esta manera, incluso después de mi muerte, no podrán venir a bailar sobre mi tumba ni los estúpidos ni los cobardes, ni los cretinos ni los malnacidos".

Charles de Gaulle (1890-1970): "Quiero ser enterrado en Colombey-les-deux-Eglises. Si muero en otra parte, mi cuerpo debe ser trasladado allí sin ceremonia pública de ningún tipo. Mi tumba será la misma en la que yace mi hija Anne, y donde también descansará, algún día, mi esposa. La inscripción dirá, simplemente: Charles de Gaulle. Nada más...No se pronunciará ninguna oración, ni en la iglesia ni en otra parte".

George Washington (1732-1799): "...Deseo que todos los esclavos que poseo por propio derecho (eran 277 personas) reciban su libertad. Que todos ellos sean confortablemente vestidos y alimentados...Y a mi mulato William, que se llama a sí mismo William Lee, le doy la libertad de inmediato. Salvo que él mismo, por invalidez u otro motivo, desee permanecer en la situación actual".

Benjamin Franklin (1706-1790) prócer americano: "A mi hijo William Franklin, último gobernador de los Jersey, le dejo todas las deudas de que es responsable, las cuales no podrán ser exigidas a mis albaceas. La parte que él tomó en mi contra durante la última guerra, que es del dominio público, justificará que no le deje nada más de un patrimonio que él me quiso quitar". 
El Sr. Franklin dejó importantes bienes a su hija Sarah y su yerno, Richard Bache.

John Lennon (1940-1980) músico inglés, integrante de The Beatles: "Aquí designo, establezco y nombro a mi amada esposa Yoko Ono para actuar como ejecutora de esta última voluntad y testamento...También como Guardiana de la persona y propiedad de cualquier hijo que pudiera sobrevivirme". Lennon murió asesinado por Mark David Chapman a las puertas del edificio Dakota de Nueva York, donde vivía junto a Ono.

Juan Manuel de Rosas (1793-1897) gobernador de Buenos Aires exiliado en Southampton: "Nombro por albacea al Honorable Lord Vizconde Palmerston...o a quien ocupe la cancillería británica para el momento de mi muerte...Cuando se casó Manuelita, le regalé un libro de la nobleza de nuestros antepasados. El otro ejemplar que tengo, si no lo regalo antes de mi muerte, será entregado a mi hijo nieto, Manuel Máximo, a quien llamo Nepomuceno José, por recuerdo noble, amor y respeto a la memoria de su padre abuelo...y del hermano de este, mi padrino de casamiento e inolvidable amigo, honorable y noble Canónigo Dignidad Don José María Terrero".

Napoleón Bonaparte (1769-1821) emperador de Francia: "...Muero en la religión católica apostólica romana, en la que he vivido durante más de cincuenta años...Deseo que mis cenizas reposen en las riberas del Sena, en medio del pueblo francés al que tanto he amado...He tenido siempre en consideración a mi querida esposa María Luisa...Recomiendo a mi hijo no olvidar nunca que ha nacido príncipe francés, y no prestarse jamás a ser un instrumento en manos de los tiranos que oprimen a los pueblos de Europa". 
Durante sus últimos días en la isla de Santa Elena, mantuvo una discusión doméstica con un servidor que lo desobedeció. Esgrimiendo un papel, le dijo: "Estoy escribiendo mi testamento, y en él le dejaré sólo 20 francos. Con eso puede comprar una soga y ahorcarse".

Cristóbal Colón, descubridor de América (1451-1506) fecha su larga voluntad final en Valladolid y, entre las numerosas disposiciones, beneficia a muchas personas desconocidas de Génova y Portugal, incluso "un judío (sin nombre) que moraba en la puerta de la judería de Lisboa".

En fin, estos documentos suelen ser complejos, pero vale la pena buscar en alguna parte este viejo libro que incluye los legados completos de Elvis Presley, Groucho Marx, Salvador Allende, Francisco Franco, Eva Perón, William Shakespeare, Pablo Neruda, Lenin, Nelson Rockefeller y Madame Pompadour. Entre muchos otros.

El que busca, encuentra


La Nación. Buenos Aires







lunes, 25 de agosto de 2014

BEA CRESPO



Bea Crespo, doble sentido y triple lectura

Olmo Rodríguez


Ilustración para Rude MagazineThe Skin Issue

Hay ilustraciones que “cuentan algo nuevo cada vez que vuelves a mirarlas”. Imágenes que hipnotizan, enganchan, de las que no puedes quitar el ojo, y que tras la primera idea siguen escondiéndose nuevas historias. Hasta una “doble y triple lectura” tienen las composiciones de la ilustradora Bea Crespo. Confiesa “jugar con el doble sentido” y “dar la vuelta a la tortilla tanto visual como conceptualmente” logrando así sugerentes escenas que “se llenan de nuevos conceptos poco a poco”. 
Entre sus referentes, ilustradores de la talla de Pablo Amargo, Isidro Ferrer, Pep Carrió, Tatsuro Kiuchi, Keith Negley, Nick Dewar o Alessandro Gottardo. Aunque Crespo destaca que “muchas veces son ilustraciones y no ilustradores” lo que influye con más fuerza en su trabajo. El minimalismo de esta generación de artistas impregna los dibujos con personalidad propia y las formas delicadas que conforman su estilo “puramente conceptual”. De hecho, intenta “ponerse límites cuando ilustra” con el objetivo de “mantener las ilustraciones limpias y directas”. Cada uno de los elementos juega un papel fundamental, un puzzle visual en el que cada pieza fluye con armonía.
Con estas cualidades no es de extrañar que su especialidad sea el mundo editorial donde ya cuenta con clientes (nacionales e internacionales) como Grupo Expansión (México), HR Magazine,Opticks Magazine, Lineker Magazine, El Malpensante (Colombia) o Dinero Inteligente (México). Un campo muy ecléctico en el que le toca ilustrar desde conceptos financieros a dilemas amorosos, pasando por temas sociales y deportivos. Asegura que cada proyecto le “marca de alguna manera” pero tiene “especial cariño a las ilustraciones que realiza para el Grupo Expansión”. Al colaborar asiduamente con ellos ha creado un vínculo de mayor complicidad con “un lenguaje común que suele dar muy buenos resultados”.

Pero antes de agarrar el lápiz y bocetear los primeros trazos, hay que tejer la idea. Un proceso creativo que nace con la meticulosa lectura del texto a ilustrar, primera fase de documentación y análisis en la que desgrana cuidadosamente palabras y posibles historias. La artista segoviana, asentada en Barcelona, asegura pasar más tiempo puliendo la idea que “creando la ilustración en sí”. Si bien sintetizar complejos asuntos en una nítida imagen es el reto principal de sus ilustraciones que pueden “sostenerse por sí solas” y que transmiten “ideas más allá de las palabras que apoyan”. 

How is your financial health?. Dinero Inteligente Magazine, México



Nadar en Madrid, Revista Madriz


Ilustración para El Malpensante, Colombia



Cómo conseguir tus propósitos en el 2013, revista Mía



Ilustración para El Malpensante, Colombia



 Ilustración para un artículo sobre la protección de la propiedad intelectualGrupo Expansión (México)









Todas las imágenes cortesía de Bea Crespo. Todos los derechos pertenecen al autor. Para más información sobre Bea Crespo  www.beacrespo.es